Compartimos piso con un viejo que se llama Chica. A veces escupimos en su comida. Empieza siempre el propio Chica. «Llamadme Zicca, tíos».
Las llaves del piso son Estrellitas, unos cereales que se deshacen siempre abrimos la puerta con un puño el nuestro. «¡Eh, pero EHHH! Buenos puños, qué golpes», dice Chica.
Cuando ALGUIEN DEL PISO muere, hacemos una barbacoa que nos sale buenísima invitamos a todos. Alquilamos un millón de sillas con forma de barbacoa y unas llamas artificiales, todo de arcilla. «Si te despistas, en el culo, las chispas», canta Zicca to locoh cuando alguien se sienta en las de verdad. «SI TE DESPISTAS, TUS NALGAS TURISTAS».
Chica tiene la obsesión de invitar a té a los carteros. «Venga, os envito a unos puñetazos, hijos de puta, os envito a MI TÉ». Les dice barbaridades. Les dice OS ENVITO.